Hasta siempre, Carlos Robles “El chaparro de Oro”, uno de los grandes de la música de Juchitán
#Juchitán 06 Dic (#Istmopress).- A sus 86 años de edad dejó de existir por causas naturales la madrugada de este jueves , el “Chaparro de oro” Don Carlos Robles quién fue uno de los iconos más importantes de la música regional de Juchitán y del Istmo de Tehuantepec.
El maestro Carlos Robles hizo su trayectoria musical de más de 70 años y fue ejemplo para muchos artistas de esta tierra istmeña, con su saxofón alto conquistó países importantes de América Latina.
Países como Cuba, Jamaica, Venezuela, Costa Rica, Panamá y El Salvador se deleitaron con los sones regionales como la Sandunga, la Llorona, Fandango Teco y muchos más que dejaron huella de la memoria musical de maestro Robles.
Oriundo de Juchitán Oaxaca nació el 3 de noviembre año de 1928, el artista creó arte musical con su orquesta que se bautizó con su mismo nombre y “Orquesta de Carlos Robles” que fundó en 1950 siempre ha privilegiado los sones regionales, boleros, danzones y hasta el tango.
Autor de innumerables temas musicales también se caracterizó por ser arreglista, lo cual ha sido el triunfo de la interpretación de diversos temas, siendo su favorito el tango “Nostalgia” de Carlos Gardel.
La herencia musical del “Chaparro de Oro” fue por su abuelo y su padre ambos músicos de banda tradicional y de ellos aprendió a interpretar sones regionales y hacer música como arte.
Padre de 6 hijos y esposo de Elsa Cabrera Regalado, a los siete años comenzó a convivir con la música y aprendió de su maestro Manuel Hernández y desde entonces no ha dejado de tocar los sones tradicionales, boleros y el tango.
Sus años maravillosos fueron en los setentas cuando recibió una invitación de parte de Mario Kuri quién en una visita que realizó a la región del Istmo de Tehuantepec lo escuchó tocar en el parque de Juchitán y se enamoro de sus canciones por lo que le ofreció un contrato para recorrer países de américa latina.
Carlos Robles y su orquesta se reunieron con el entonces presidente de la república Luis Echeverría Álvarez y firmaron un contrato de dos meses y diez días en los cuales compartieron la música que se toca en los pueblos del Istmo de Tehuantepec y de su natal Juchitán.
Su nieto Roque Robles, también músico lo recuerda como una persona sabia y amante de la música, siempre le inculcó valores y el amor por los instrumentos musicales.
“Mi abuelo se ha ido pero nos ha dejado toda su vida en la música, lo recordaré siempre, a él le afectó como a muchos abuelos el terremoto que colapsó su vivienda la noche del terremoto, a partir de entonces todo cambio y lamentablemente este jueves por la madrugada falleció”.
El chaparro de oro será sepultado este viernes en el panteón Domingo de Ramos de su natal Juchitán, se espera que reciba homenajes póstumos de parte de varias bandas musicales, pues el icono, el maestro del saxofón se ha ido de la faz de la tierra.