Cuatro años del terremoto de 7S y damnificados no reciben ayuda en San Dionisio del Mar, Oaxaca
#SanDionisiodelMar 7 Sep (#Istmopress) – Hace cuatro años, el 7 de septiembre de 2017, un terremoto de 8.2 grados colapsó su vivienda y desde entonces, sus días los pasa debajo de una lona verde o en la casa de su nieto. María Luisa Barroso Muriel es indígena ikojts de San Dionisio del Mar, Oaxaca, tiene 90 años y vive junto con su hija y su yerno; los tres son damnificados que llevan cuatro años esperando la ayuda que el gobierno prometió para reconstruir su casa.
Vivir sin casa y en medio de una pandemia, además de la falta de acceso al agua potable, ha sido una verdadera odisea para la familia de esta mujer que a sus 90 años añora algún día recuperar su único patrimonio.
“Si la casa hablara ya se enoja porque quién sabe cuántas veces le han tomado fotos, pero la ayuda que prometen no llega, todo es mentira”, denunció Dolores Juárez Barroso, hija de María Luis Barroso que asegura que autoridades van y vienen, pero a ellos no les ayudan.
La casa es de ladrillos y block de cemento, piso de lodo, techo de adobe y está desgastada. Y aunque está de pie, sus paredes tienen grietas y su techo gotea, nadie vive en su interior por miedo a que colapse.
En su exterior tiene un número de folio “69000120” y solo le entregaron en el 2017 de parte de Sedatu 15 mil pesos para rehabilitar, pero el daño fue mayor y solo sirvió para rehabilitar el techo, pero la obra quedó a medias porque el recurso no alcanzó.
Por su edad, María Luisa Barroso ya no se vale por sí misma, escucha poco y camina con apoyo, su hija y su yerno son lo que le brindan atención las 24 horas del día.
Triste, expresó que su sueño antes de morir es ver su casa reconstruida, porque lleva mucho tiempo viviendo debajo de una lona y con su nieto.
Por las mañanas colocan una hamaca y se acuesta debajo de la lona, pero en la temporada de lluvias y aire fresco se traslada a casa de su nieto, quién le brinda refugió junto a sus padres.
Su yerno, Nicéforo Noriega, expresó que como viven en la parte norte y abandonada de la localidad, nadie los visita ni les brinda ayuda.
San Dionisio del Mar es un municipio indígena del Istmo de Tehuantepec donde viven unos 5 mil habitantes, incluido menores de edad y se localiza a 7 horas de la capital oaxaqueña.
*Han pasado los servidores de la nación pero no me ayudan en nada
A dos cuadras del centro de la localidad, se ubica la casa de Dionisio Marín Cabrera también indigena ikojts de 58 años de edad, la vivienda de adobe y tejavana colapsó por completo, parte del techo se cayó y está agrietado, pero no ha recibido un solo centavo para la reconstrucción.
Dionisio, su esposa y su nieto desde hace cuatro años viven en otro sitio porque dentro de su casa es imposible, todo está intanto, tirado y regado en el suelo desde la noche del terremoto.
“No hemos levantado nada, los servidores de la nación pasan y lo miran, me dicen que no me dan el apoyo porque no vivo en mi casa, pero pues aquí no puedo vivir, es un peligro, con la lluvia y la humedad puede colapsar, todas las paredes están lastimadas y el techo más, pero a la fecha no recibo un solo peso para reconstruirla”.
Cada que la visita la ve más dañada, pero no puede hacer otra cosa, porque no tiene el recurso para reconstruirla.
“Me dicen que con el ex presidente Peña Nieto dieron primero 120 mil pesos, pero no me tocó, y ahora con Andrés Manuel López Obrador tampoco, no entendemos qué sucede, porque la ayuda no llega, mi casa cada vez se pone más fea y desgastada, lleva cuatro años esperando una reconstrucción digna”.
Además de Dionisio y la familia de María Luisa Barroso, otra decena de familias de esta etnia viven en esta misma situación. Los servidores de la nación pasan, le toman fotos y se van. Algunos de ellos señalan que todo se debe a la cuestión política que vive la comunidad, pues algunos apoyan a los integrantes de la Asamblea del Pueblo de San Dionisio del Mar y otros a los partidos políticos.
En la ceremonia de conmemoración del cuarto aniversario del terremoto en Juchitán, Oaxaca, el subdirector general de la Comisión Nacional de Vivienda, Javier Granados Barrón y David Cervantes Paredo, informó que en 2019 para la reconstrucción de viviendas afectadas en todo el estado de Oaxaca, se tuvo una inversión para de $1,518 millones de pesos con 11,595 acciones de vivienda y se atendieron 54 municipios.
Para el año 2020, la inversión fue de 675 millones de pesos para 3999 acciones más en 33 municipios.
Y en este 2021, la Conavi está atendiendo en 47 municipios, un total de 1790 acciones.
A la fecha, en el programa de nacional de reconstrucción de vivienda, esta dependencia de los tres años acumulados tiene una inversión total para todo el estado de Oaxaca de $ 2,833.03 millones de pesos y han atendido a 17,384 acciones de vivienda; de esas, 4900 son de daño parcial y la gran mayoría 12,323 de daño total, adicionalmente han atendido 73 viviendas con valor patrimonial particularmente en el Istmo y se atiende viviendas con sistema tradicionales de construcción.
Por último, la Conavi ha atendido 67 municipios y se han generado 70 mil empleos directos y 25 mil indirectos.
Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress