Pamela Terán, un icono de la lucha popular
“Todos los días morimos un poco, pero no por las balas, sino por la indiferencia que mostramos al prójimo”
#Juchitán 13 May (#istmopress) – Desde que inició esta jornada electoral, la candidata independiente Pamela Terán Pineda no ha logrado descansar, su agenda apretada la lleva a mantener un intenso recorrido en la cabecera municipal, secciones, colonias populares y agencias municipales, porque su finalidad ha sido dialogar con el mayor número de ciudadanos para invitarlos a sumarse a su proyecto político.
La aceptación ha sido inmediata, porque con su don de gente ha despertado el entusiasmo en el electorado que ya no quiere más de lo mismo, sino que, ahora exige un cambio y una manera de gobernar y hacer política diferente.
Esta que considera una verdadera fiesta cívica ha provocado una participación activa de sus seguidores quienes la han instado, principalmente a través de las páginas sociales a no darse por vencida bajo ningún motivo, porque la consideran un icono de la lucha popular, una esperanza para cambiar el destino de Juchitán.
Así, con un calor especial que solo ella sabe dar, es recibida en todas partes, para dialogar con mujeres, hombres y personas de la tercera edad, con un propósito, encontrar en estos encuentros, en estos diálogos, una manera de ofrecer respuestas a un sin fin de reclamos, de necesidades, de exigencias que durante años no han sido atendidos por los partidos políticos.
Y frente a los acontecimientos que han cimbrado a la sociedad y han lacerado a muchas familias por la violencia y la inseguridad que han tomado por asalto este municipio, Pamela Terán Pineda, con el llanto reflejado en el rostro, con un rictus de angustia dice estar dolida por todo.
En su cuenta de Facebock, Pamela Terán escribió, dolida por los últimos acontecimientos que se registran en la ciudad de Juchitán un mensaje inesperado, que la proyecta como un ser humano que al igual que muchísima gente de la ciudad, piden que cesen estos hechos que lastiman a los juchitecos.
“Hemos visto morir a inocentes y se nos ha vuelto normal ver las calles teñidas de sangre, todos hemos muerto un poco [por ello] pero no por las balas, sino por la indiferencia y la apatía que mostramos al prójimo”.
Y al final cierra con un ¡basta! de “conformarnos con la realidad en la que vivimos, porque los juchitecos, merecemos algo mejor”.
A juicio de ella este es momento de sembrar, de cultivar la honestidad, de reflejar la integridad en las acciones y de ayudar al prójimo. Es tiempo, añadió, en su mensaje a la sociedad en general, de ensuciarnos las manos a través de un trabajo honesto y legítimo.
Texto y foto: Carlos López