Estudiantes de secundaria cosechan plantas medicinales a través del huerto escolar
#Niltepec, Oax. 25 Jun (#Istmopress) – Los pequeños trozos de madera entintados con colores primarios donde están anotados los nombres de plantas como albahaca, yerbabueba, verbena, estafiate entre otros más resaltan en el huerto escolar de plantas medicinales, que jóvenes estudiantes de tercer grado de secundaria cultivan para conservar la vida tradicional de su pueblo de Niltepec Oaxaca, ubicado en la zona oriente del Istmo de Tehuantepec.
Este proyecto surgió hace dos años, pero con el sismo del 7 de septiembre quedó abandonado por la suspensión de clases debido al daño de las aulas y fue hace algunos meses cuando nuevamente se retomó de parte de su impulsora, la profesora Olivia Castillejos Dehesa quién busca crear entre los jóvenes el amor por la tierra y la vida comunitaria.
Son 20 plantas medicinales las que fueron colectadas y sembradas en el huerto escolar por los estudiantes que pertenecen a la Escuela Secundaria Técnica Número 75 .
Cada planta medicinal fue colectada por cada uno de los estudiantes, algunas extraídas de sus huertos personales y otras de los campos que abundan en esta zona.
Emiy Michell Cruz Santos, originaria de la agencia municipal Santo Domingo de Niltepec y que diariamente toma un transporte publico para llegar a su escuela es una de las estudiantes que más conoce el uso de las plantas medicinales, el aprendizaje lo obtuvo de su abuela y su madre.
Para ella ha sido de amplio conocimiento formar parte el huerto, porque en su comunidad la mayor parte de los habitantes usan las plantas medicinales para cada uno de los males que les aqueja.
“Tener un huerto en la escuela me ha gustado mucho, en mi casa preferimos curarnos de los males tomando un té, y eso lo heredé de mi abuela, una mujer sabia que me dejó esa enseñanza y que quiero enseñar a los estudiantes de mi escuela, las plantas purifican y relajan”.
Ovidio y Maximiliano, son otros dos estudiantes que también han sembrado plantas en el huerto, durante la mañana las riegan y las cuidan de las plagas, especialmente de las hormigas arrieras que intentan consumirlas.
A ambos cultivar una planta y cuidar el huerto ha sido la mejor terapia escolar, durante una hora a la semana se reúnen en el espacio y entre charla y charla comienzan a limpiar la maleza, y también acomodar las piedras y cultivar sus cosechas.
Las plantas no las venden, las regalan y son útiles para todos los estudiantes, por ejemplo recuerda Maximiliano que la yerbabuena la usan como té en caso de dolor de estomago y la menta para el aliento.
“Aquí todo se usa, y ha servido para todos, cuando la necesitan nos buscan, cortamos un pedazo y se los regalamos”.
Olivia Castillejos Dehesa, profesora e impulsora de este proyecto aseguró que ha sido de gran aprendizaje para todos conocer las plantas medicinales que existen en su comunidad así como el uso, pero lo mejor es que los estudiantes las conocen y van a transmitir ese conocimiento de generación en generación.
Agregó que para este fin de ciclo escolar realizaran un ritual donde los estudiantes van a heredar el huerto a otro grupo, debido a que están a pocos días de concluir su nivel secundaria para continuar sus estudios de preparatoria y por lo consiguiente será un nuevo grupo el responsable de cuidar las plantas.
“Estoy muy contenta por que el proyecto va a seguir, con este huerto de plantas medicinales los estudiantes están reforzando su conocimiento comunitario, el que les dejó las abuelas y eso es bueno, porque no se perderá y se transmitirá de generación en generación”.
Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress