Modifican los rituales de sepelio por COVID-19 en el Istmo
#Mixtequilla 7 Abr (#Istmopress) – Se suspendieron los avisos por los altavoces que son el medio comunitario donde se invitan a las personas para acompañar a velar el cuerpo presente del difunto , tampoco hubo misa y solo se realizó la bendición del párroco de la iglesia, en el entierro la música estuvo ausente, el ritual de los sepelios en Mixtequilla Oaxaca, una localidad ubicada en el Istmo de Tehuantepec se ha modificado por el COVID-19.
Mientras velan al difunto frente a la mesa del santo, los familiares cuidan la sana distancia y usan cubre bocas, Don Isidro de 77 años de edad no murió de Coronavirus ni fue un paciente positivo , su muerte fue por otro padecimiento sin embargo su funeral se modificó a causa de la emergencia por Coronavirus.
Los abrazos se restringieron, la gente no participó con su cooperación ni la ayuda económica, todo procedió en un ambiente totalmente familiar, inclusive los abrazos de consolación se limitaron y se cuidó la sana distancia.
La familia de Isidro asegura que fue difícil sepultarlo en medio de una pandemia, donde se ha restringido salir de casa y asistir a un entierro.
“Fue alto difícil y triste, porque en todo momento evitamos el contacto con los familiares, la poca familia que llegó estuvo afuera y a distancia, adentro los hijos del abuelo y algunos nietos, entrabamos por turnos, además usando cubrebocas, es triste velar a un ser querido en estas condiciones”, explicó Sara, su nieta.
Sara narró que estas medidas se tomaron porque la abuela y esposa de Don Isidro también está enferma de problemas en los pulmones, por lo que ahora con el Coronavirus se han exagerado en las medidas sanitarias.
“Estamos cuidándonos de no contagiar a la abuela, es una mujer de 70 años y con problemas en los pulmones, y como el abuelo estuvo hospitalizado cerca de una semana, entonces eso nos preocupa, es triste para la familia despedir a un familiar y no hacer el ritual tradicional por la emergencia en que vivimos”.
Durante el sepelio, únicamente los familiares cercanos acompañaron a Isidro en su ultima morada, no hubo música y fue muy rápido, los cubre bocas y la sana distancia fue notoria durante el funeral.
“No pensamos vivir esta situación, ni cuando fue el terremoto, al contrario mucha gente fue solidaria, pero ahora este virus volátil nos tiene a todos con miedo, y es mejor quedarnos en casa y seguir las recomendaciones”.
Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress