Muere “Mandu cano”, icono de la comunidad muxe de Juchitán Oaxaca
*Famoso por dedicar medio siglo en la elaboración de dulces típicos del Istmo de Tehuantepec
#Juchitán 24 Ene (#Istmopress) – Armando Cano “Mandu Cano”, icono de la sociedad muxe zapoteca y famoso por la elaboración de dulces tipicos del Istmo de Tehuantepec, falleció a los 76 años en su natal Juchitán Oaxaca, confirmaron familiares y amigos.
Mandu Cano elaboró dulces tradicionales de papaya, calabaza, chilacayota, limón con coco y otros ingredientes por más de medio siglo (50 años) y además gozó del reconocimiento social por ejercer a plenitud y con total libertad su sexualidad; vivió con su pareja de nombre Jorge por varias décadas en su casa en la octava sección de esta ciudad oaxaqueña.
Su cabellera esponjada, las holgadas camisas, su pantalón de tela suave y sus huaraches lo caracterizaban, antes de la pandemia, en su triciclo colocaba las cacerolas de dulces y los ofertaba frente al palacio municipal de Juchitán.
En el sismo del 2017, su vivienda colapsó y recibió apoyo de diversas organizaciones, quienes le ayudaron a reconstruirla.
Su muerte causó tristeza y recuerdos, sus vecinos de la octava sección resaltaron que además de los dulces típicos, todos los días a través de su altavoz comunitario su voz se escuchaba dando avisos, pero este día nadie informó de su fallecimiento.
Su sobrina Maritza Cano recuerda que su tío abuelo era una persona noble y simpática, por eso lamentó su fallecimiento.
Dijo que el médico le informó que su glucosa se alteró, además de que sus riñones ya no funcionaban adecuadamente, además de que ya no funcionaban bien, entonces eso le provocó cansancio y finalmente murió.
“Estamos muy tristes con la muerte de mi tío abuelo, lo quisimos tanto, se va un gran de Juchitán, un hombre muy trabajador, que dormía tarde y se levantaba muy temprano, nos duele su partida”.
Felina Santiago, activista muxe y representante del colectivo “Autenticas intrépidas buscadoras del peligro” reconoció que Armando fue un gran hombre y por lo consiguiente un “ejemplo a seguir como los muxes de antaño”.
“Armando Cano fue un amigo muy respetado, todas las muxes le decíamos “Tio Mando” como respeto, a veces le llevábamos despensa, siempre estaba acompañado de mucho tiempo en vida de su compañero de vida, Jorge, y él le ayuda a elaborar dulces y lo llevaba por todos lados”.
Por último dijo que “Mandu” era un muxe ejemplo de lo que es la libertad y la diversidad sexual, por eso es respetado, y se le recordará como un icono de la muxeidad, del trabajo y de la gente dedicada en Juchitán Oaxaca.
Diana Manzo Agencia de Noticias IstmoPress