Murió Temístocles Girón , el palabrero, el sabio y Mbioxho más antiguo de en Oaxaca
#SanPedroComitancillo 01 Mar (#Istmopress) – Temístocles Girón Echeverría, sacerdote binnizá (zapoteca) y el mbioxho más antiguo de la danza de San Pedro Mártir, murió en su natal “Ndaniguiaa” cómo se le llama a San Pedro Comitancillo y con él se va un legado histórico y cultural importante de este pueblo oaxaqueño asentado en el Istmo de Tehuantepec.
De 83 años de edad, Temístocles, considerado el «usana” o el parabien, como un palabrero muy sabio, representaba la historia viva de esta comunidad zapoteca, donde todavía sobrevive el tequio, el trueque y los bailes tradicionales.
Los mbioxhos son guerreros que lucharon contra el enemigo para ganar libertad de su pueblo, y Temístocles era el más antiguo, el de mayor conocimiento, por eso lo llamaban el sacerdote zapoteca.
Fuerte, leal y amoroso, así se le recuerda como el que siempre danzó y luchó para preservar esta danza autóctona que representa libertad e identidad.
En el 2008, recibió un reconocimiento otorgado por el Órgano de Desarrollo Cultural “Diidxazá Biliibi”, con quienes grabó el disco “Ca mbioxhu n Dani guía”, en donde narran dialogos de la tradición del mbxioxho, que se realiza en honor al patrón San Pedro Mártir.
“Era el ultimo labrador de cera del pueblo, el que hacia las velas tradicionales” cuenta Mariana Alejandra, activista comunitaria y amiga de Temístocles.
“Era un gran ser humano y por supuesto lo respetamos hasta el último día de su vida, nos duele su muerte, porque físicamente ya no estará con nosotros, pero nos dejó un gran legado, una gran escuela, los mbioxos sobreviven gracias a él, quién siempre motivó a otros a danzar este baile típico importante de nuestro rito zapoteca”externó.
A Temístocles le sobrevive su esposa y sus hijos, quienes en su altar tienen colocada la imagen de quien fuera uno de los danzantes más importantes que ha tenido San Pedro Comitancillo.
**La Danza de los Mbioxos**
De acuerdo con datos históricos, la danza de los “mbioxos o mascarados” se realiza durante 10 días, a partir del 18 de abril.
Los danzantes y músicos recorren las calles de Comitancillo, y en cada casa reciben una ayuda monetaria que al término se distribuye entre todos los mbioxhos.
La música a cargo de un tambor y un pitero es alegre, los mbioxhus procuran divertir a los espectadores; la temible Chuga se abalanza a cuanto varón se cruza enfrente, los seduce y les baila, siempre y cuando el Chicotero lo permita.
Solamente en la danza principal, tras el rugir del látigo, el ambiente se torna épico, y los guerreros se lanzan a la batalla.
El Caballo acosa a los Mbioxhus , los golpea y maltrata, estos lo rodean y enfrentan uno a uno, hasta herirlo del cuello y tomarlo prisionero; otros personajes son “el Chicotero” (capataz o negro mayor) que hace sonar el látigo para que inicie la danza; y “la Chuga” (o malinche), que con ropas y máscara de mujer acosa a los espectadores.
Anteriormente las máscaras de los mbioxos eran elaboradas de corteza de árbol, actualmente la mayoría usa de plástico o papel, porque les permite mayor movilidad.
Esta danza también recuerdan los mayores de Comitancillo es una penitencia, que les sirve para purgar sus pecados.
El legado de Temístocles perdura para siempre dicen quienes lo conocieron y admiraron porque siempre se preocupó por preservar este legado de la danza de los mbioxos o enmascarados, cuya tradición es antigua y que va en decadencia.
Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress