Taller Momé a cargo de Guillermo de la Cruz, expone muestra de carteles en Galería Gubidxa
#UniónHidalgo 28 Feb (#Istmopress) – En un mes del 17 febrero a 17 marzo del año 2024, se muestran los carteles con trazos y dibujos, un proyecto de Guillermo de la Cruz, a través de su taller Momé, ubicado en Tehuantepec, Oaxaca. A hora se presentan en la Galería Gubidxa, espacio independiente con residencia oficial en Unión Hidalgo, cuyo propósito es presentar, conversar y compartir con artistas comprometidos con el arte y el medio ambiente.
En esta muestra podemos apreciar el trabajo que se ha venido realizando desde hace cinco años, primero en la ciudad capital, donde Guillermo, que prefiere ser conocido como Momé, en una especie de anonimato y clandestinidad que despierta el arte urbano como el grafiti, recorre la cuidad y ve oportuno el sitio, no duda y deja adherido el cartel sobre la superficie, durante este lapso le ha pasado de todo, ya sea, que el cartel se vandalice, o borrado, o que se lo lleven entero.
A él no le inmuta, si se pierde, en otro momento, más tranquilo las reproduce, y una vez ejecutado sale a buscar nuevos espacios e incluso vuelve al mismo sitio escogido y espera la suerte o mejor suerte para la nueva pieza reproducida.
De tal manera que algunos carteles los presenta ajados, o están muy trabajados, rostros de mujeres que están en la vanguardia en una de las problemáticas de la vida, o seres queridos mujeres u hombres como sus amigos, rostros que tienen el cuerpo de un personaje muy conocido o popular.
Es una galería de rostros sonrientes, meditabundos o tristes, rostros que protestan y cuya protesta esta inscrita en el cuerpo del cartel. En esta muestra están las menos transgresoras refiere Momé. Las más subversivas están en la ciudad, las he dejado en la calle, rodeando algún edificio de gobierno o un lugar turístico.
Los rostros escogidos por Momé, tienen mucho color, están trazados a mano alzada, y parecen figuras que se hacen de una sola línea, otros están en enmarcadas en nichos que recuerdan el imperio romano, es una mezcla de contemporaneidad y una búsqueda fresca para inmortalizar personajes comunes.
Los carteles tienen cierto aire efímero, por la fragilidad del soporte, pero tienen esa resonancia que provocan los dibujos a primera mano, este misterio que les imprime, es una alegría y un punto de reflexión que nos presenta el perturbador tema de las injusticias, cada rostro está ahí para recordarnos que este mundo tiende cada vez a su destino de autodestrucción, acá se ve más cerca, paro por ahí se cuela una luz intensa como lo hace el arte, siempre.
Víctor Fuentes